Logopedia en la atención temprana en A Coruña
Concepto de Atención Temprana
«Se entiende por Atención Temprana el conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0-6 años, a la familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar o transdisciplinar». Libro Blanco de la Atención Temprana (GAT, 2000)
Calendario del desarrollo del niño de 0 a 18 meses (AGAT)
«Con esta infografía se pretende dar una visión general del desarrollo infantil. Hace referencia al momento aproximado en que los niños logran determinadas adquisiciones en los 18 primeros meses de vida.
Cualquier carencia o variación en la adquisición de alguna de las pautas indicadas no supone necesariamente que el niño o la niña tenga algún trastorno, pero en estos casos se recomienda consultar con el pediatra».
Objetivos de la Logopedia en la Atención Temprana
El principal objetivo es desarrollar el lenguaje y la comunicación de los niños, tanto a nivel comprensivo como expresivo, así como mejorar las condiciones de las estructuras orofaciales y sus funciones (voz, respiración, masticación, deglución…), tratando de minimizar los déficits que puedan presentar en estas áreas. Más específicamente:
- Desarrollar prerrequisitos del lenguaje
- Desarrollar un lenguaje funcional
- Aumentar la capacidad de comprensión
- Mejorar la capacidad expresiva
- Eventualmente, implementar Sistemas
- Alternativos y/o Aumentativos de Comunicación (SAAC)
- Mejorar estructuras y funciones orofaciales
- Potenciar las cualidades acústicas de la voz
Metodología de trabajo
- Evaluación inicial al niño para determinar aquellas áreas en las que muestre una dificultad o alteración
- Planteamiento de objetivos e intervenciones individualizadas atendiendo a las necesidades específicas del niño.
- Revisión periódica de la efectividad de las intervenciones y actualización de objetivos en función de la evolución de cada niño, con el fin de que el tratamiento sea lo más eficaz posible.
La implicación de las familias es un pilar fundamental, por ello periódicamente se proporciona a los padres un feedback en el que se explican los objetivos que se trabajan con los pequeños y se ofrecen pautas y estrategias para que los apliquen en los diferentes contextos de la vida diaria con el objeto de favorecer los procesos de aprendizaje y promover el desarrollo del niño.